Son varios los llamados que siervos de DIOS hacen al pueblo cumanés hacia la reflexión, al recogimiento en oración, a la búsqueda del arrepentimiento ante los ojos de JEHOVÁ, pero tales advertencias caen en el saco roto de la indiferencia, del corazón endurecido de la gente que anda distraída en las cosas del mundo, sin reparar que hay un SUPREMO SER que desde su TRONO DE GLORIA, asentado de manera firme en medio de la ALABANZA, está enojado con el pueblo dedicado a las inmoralidades, a la idolatría, a la santería, palería, brujería, artes adivinatorias y al agorerismo como nunca antes y además al culto al hombre.
La maldad está desatada en Venezuela y hay juicio de DIOS para este país, para sus gobernantes, para el pueblo venezolano y dentro de él incluso para quienes andamos atravesando por la misericordia de TODOPODEROSO las sendas del SANTO EVANGELIO.
OREN por Venezuela, por Caracas, por Cumaná, por las familias, por los niños, las embarazadas y los ancianos. Recuerden los ejemplos de los tiempos de Noé, cuando sus pares se burlaron de él por construir un arca en medio de aquellos sequedales. Vino el diluvio y se los llevó a todos mientras fornicaban (sexo desbocado), se daban hombres con hombres y mujeres con mujeres, hedonismo, borracheras y todo tipo de desviaciones que son ABOMINACIÓN a los ojos de AQUEL que juzga todas las cosas.
Lo mismo ocurrió con Sodoma y Gomorra, donde sólo se salvó el justo Lot, el sobrino de Abraham. El llamado es hecho, pero son muy pocas las manos que se entrelazan y las rodillas que se doblan en señal de arrepentimiento y sometimiento ante JEHOVÁ DE LOS EJÉRCITOS. Cada quien, como dijo el SEÑOR JESUCRISTO, tome su cruz y sígalo. Después que nadie diga que no se dijo nada. ORAR, humillados y en arrepentimiento, es la clave para que no se desborde la ira de DIOS.
Muchas personas, creyentes, no creyentes, de distintas prácticas en la fe, han recibido de lo ALTO visiones en sueños sobre sucesos terribles que se aproximan a Venezuela. Niños, jóvenes, gente que no se la pasa metida en un templo, aunque creen en DIOS, han sido inquietados en el espíritu por esta situación.
Conste que no me la doy de profeta, porque DIOS es quien escoge como se le ha de servir. Soy un insignificante siervo inútil como señala el SEÑOR JESUCRISTO en su Palabra; mas siervos pastores y evangelistas del DIOS ALTÍSIMO, que no están atados a compromisos económicos y que pregonan la Palabra de DIOS, a riesgo de ser tildados de chiflados o locos de atar, realizan la advertencia en cada sitio donde predican el mensaje de salvación del SEÑOR JESÚS.
Ellos hacen el llamado y sólo reflejo la previsión, la angustia y el cumplimiento por parte de estos varones de efectuar tales prevenciones en los cultos y campañas. Lo demás... queda a criterio de la gente. CRISTO ES EL CAMINO, usted decide si lo toma o se va por el suyo propio, con las consecuencias que todo eso le traerá.
La maldad está desatada en Venezuela y hay juicio de DIOS para este país, para sus gobernantes, para el pueblo venezolano y dentro de él incluso para quienes andamos atravesando por la misericordia de TODOPODEROSO las sendas del SANTO EVANGELIO.
OREN por Venezuela, por Caracas, por Cumaná, por las familias, por los niños, las embarazadas y los ancianos. Recuerden los ejemplos de los tiempos de Noé, cuando sus pares se burlaron de él por construir un arca en medio de aquellos sequedales. Vino el diluvio y se los llevó a todos mientras fornicaban (sexo desbocado), se daban hombres con hombres y mujeres con mujeres, hedonismo, borracheras y todo tipo de desviaciones que son ABOMINACIÓN a los ojos de AQUEL que juzga todas las cosas.
Lo mismo ocurrió con Sodoma y Gomorra, donde sólo se salvó el justo Lot, el sobrino de Abraham. El llamado es hecho, pero son muy pocas las manos que se entrelazan y las rodillas que se doblan en señal de arrepentimiento y sometimiento ante JEHOVÁ DE LOS EJÉRCITOS. Cada quien, como dijo el SEÑOR JESUCRISTO, tome su cruz y sígalo. Después que nadie diga que no se dijo nada. ORAR, humillados y en arrepentimiento, es la clave para que no se desborde la ira de DIOS.
Muchas personas, creyentes, no creyentes, de distintas prácticas en la fe, han recibido de lo ALTO visiones en sueños sobre sucesos terribles que se aproximan a Venezuela. Niños, jóvenes, gente que no se la pasa metida en un templo, aunque creen en DIOS, han sido inquietados en el espíritu por esta situación.
Ellos hacen el llamado y sólo reflejo la previsión, la angustia y el cumplimiento por parte de estos varones de efectuar tales prevenciones en los cultos y campañas. Lo demás... queda a criterio de la gente. CRISTO ES EL CAMINO, usted decide si lo toma o se va por el suyo propio, con las consecuencias que todo eso le traerá.
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