miércoles, 29 de agosto de 2012

TRAGEDIA / ANÁLISIS: Amuay, el gigante caído...


EXPLOSIÓN EN AMUAY | Análisis

Toda una refinería de estas dimensiones y complejidad y con muchas plantas paradas, tomaría, en manos de expertos, por lo menos una semana ponerla en servicio.

*HERALDO SIFONTES |  EL UNIVERSAL
lunes 27 de agosto de 2012  03:47 PM
¿Cómo es eso de que no se va a afectar el suministro con toda una refinería de 630.000 bpd parada y sin saber qué ocasionó el terrible accidente el 25 de agosto? Y para echarle más leña al fuego, todavía no se ha alcanzado su total extinción.  ¿O es que sí se sabe la causa raíz?

En primer lugar toda una refinería de estas dimensiones  y complejidad y con muchas plantas paradas, tomaría, en manos de expertos, por lo menos una semana ponerla en servicio. No es posible, entonces, que no se afecte el suministro. Si el mercado nacional se cubre con importaciones, ya verán los habitantes de mi amada Paraguaná la cantidad de  barcos esperando en el puerto por completar su despacho a destinos internacionales. Y cada día de espera de un barco debe estar en el orden de los $30.000.

Por otra parte, si ya faltan 9 tanques en un sistema de almacenaje que tiene capacidad finita, tiene que haber dificultades, por ejemplo,  para las mezclas de gasolina. Más aun, el contenido de una de las esferas es materia prima para elaborar el componente de más alto octanaje que se utiliza en esas mezclas de gasolina.

Todos aquellos que han estado en Paraguaná saben que el viento sopla muy fuerte en un altísimo porcentaje del tiempo (aproximadamente  95%). Pero hay una época del año en que el viento se detiene, que es precisamente ésta. El gas que se utiliza en la refinería como combustible y para generar hidrógeno, contiene metano en un 89%. El metano es más liviano que el aire. Y el gas también contiene propano que es más pesado que el aire.

A distancia es muy difícil opinar. Pero si todavía hay escape de gas y el viento está detenido, es muy prudente  mandar a desalojar la población circunvecina. El metano se va, pero el propano queda al ras del suelo.


*Ex-gerente general de Refinería de Amuay

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